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Memorias de un Marisco

Curiosidades

No somos hijos de los monos!!!

Estudios anatómicos desvelan que el hombre no bajó de los árboles

Un primate bípedo que vivió hace 15 millones de años originó a los humanos, a los grandes simios y a los australopitecos

La teoría de que los primeros homínidos eran descendientes de grandes monos que vivían gran parte del tiempo en los árboles ha sido contestada por una paleontóloga francesa. Estudiando la anatomía de nuestra especie, y sin ninguna evidencia fósil, ha determinado que el antecesor más antiguo del Hombre fue un primate bípedo vertical, que ostentaba una cabeza más o menos esférica y una anatomía general muy próxima a la de los humanos. Vivió hace 15 millones de años, pero ocho millones de años más tarde se separaron de este ancestro común los grandes simios, los australopitecos y los futuros humanos. Por Eduardo Martínez.

El ser humano nunca bajó de los árboles, ya que no tiene relación directa con un cuadrúpedo ni con un australopiteco, el primer primate que logró caminar en posición erecta y con sus manos libres. En realidad, el Hombre es la versión moderna de un primate ancestral que siempre fue bípedo y que vivía sobre la superficie, no en las ramas de
los árboles.

Esta es la teoría que sostiene la paleontóloga del Centro de Investigaciones Cioentíficas de Francia (CNRS), Yvette Deloison, explicada en un libro que acaba de aparecer en Francia, titulado Prehistoria del peatón. La tesis está recogida también en un ilustrativo artículo difundido por el CNRS.

La teoría de Deloison se basa únicamente en argumentos anatómicos y científicos, como la Ley de Dollo, para llegar a este conclusión, ya que no existe de momento ningún fósil que pueda apoyar su hipótesis.

La Ley de Dollo sostiene que un órgano que haya perdido algunos de sus elementos a lo largo del tiempo, no retrocede ni recupera nunca su anatomía original.

Evolución irreversible

Eso quiere decir que todos los organismos muestran, experimentalmente, que la evolución es irreversible, si bien en ocasiones aparecen derivas genéticas reversibles dentro de una especie, que constituyen la
excepción de esta ley.

Estudiando la anatomía humana, la antropóloga ha descubierto que las manos humanas nunca han podido servir de pies y que nuestra especie nunca ha caminado de cuatro patas, como pretenden las actuales teorías
científicas.

Según estas teorías, el ser humano procede de una clase de homínido cuadrúpedo que evolucionó a partir del momento en que, por diversas circunstancias relacionadas con la supervivencia, comenzó a caminar erguido.

Según la anatomía, el origen de nuestra especie debía buscarse más bien en un antepasado no especializado, un vertebrado muy antiguo que no se parecía ni al hombre ni al mono, pero que presentaba características
comunes al grupo.

Protohominoides bipes

El antecesor que reúne estas características, según Deloison, se llama Protohominoides bipes, un bípedo vertical con una cabeza más o menos esférica y una anatomía general muy próxima a la de los humanos.

Este Protohominoïde, al ser bípedo, conservó su mano primitiva y no especializada. Por el hecho de caminar erguido, su pie fue el que se adaptó hasta perfilarse como soporte de toda la estructura corporal.

Los datos genéticos permiten suponer que este ancestro común de los grandes simios y del hombre vivió hace 15 millones de años y que probablemente fue también el origen de los australopitecos, los cuales, así como los grandes simios (gorilas, chimpancés, orangutanes), se separaron de esta línea evolutiva unos ocho millones de años más tarde.

Sólo la hipótesis de un ancestro común, el así denominado Protohominoide, es compatible con el conjunto de datos anatómicos observables en los homínidos fósiles y actuales.

Híbrido simio y humano

El Protohominoide debía tener necesariamente una mano no especializada y un pie indiferenciado, ni simio ni humano. Su carácter bípedo es el que permitió el desarrollo de su cerebro, ya que al ser más vulnerable que
los cuadrúpedos, necesitaba recurrir a sus facultades mentales para sobrevivir.

Ello no impidió que algunos Protohominoides menos capacitados buscaran refugio en los árboles, evolucionando hacia la anatomía conocida de los grandes simios y de los australopitecos, que de esta forma emergen como
primos lejanos de la especie humana.

El origen y evolución de los homínidos es un proceso reciente: los hallazgos de los más antiguos progenitores directos del hombre, los Australopitecos, que vivieron en las sabanas africanas, permiten
situarlos hace cuatro millones de años.

Según las teorías convencionales cuestionadas ahora por los estudios anatómicos, los primeros homínidos del género Australopiteco eran descendientes de grandes monos parecidos a los actuales chimpancés que
vivían gran parte del tiempo en los árboles.

Estos homínidos sufrieron una serie de adaptaciones evolutivas, entre ellas la adquisición de la locomoción bípeda y de la postura erguida. Merced a estos cambios, se inició el progresivo desarrollo del cerebro
de los hombres del Paleolítico y el desarrollo de las propiedades intelectuales humanas, origen remoto del Homo Erectus, responsable de la primera gran expansión geográfica de nuestra especie.

Eduardo Martínez
Tendencias.net
2004-04-11

Toma ya... ahora resulta que ya no somos primos algo cercanos de nuestros amigos los monos si no que somos algo así como primos muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuy lejanos....

Bromas macabras

Pos me acaban de comentar que la Universidade De Navarra, uno de los chistes macabros que circulan es "Que se muera el Papa a ver si nos dan vacaciones". Tiene su gracia... xD pero bueno también es que hay gente muy mal pensada. Ahí lo dejo que no me apetece meterme en un berenjenal político-religioso.

Prejuicios de la gente...

Hoy fui a presentar los papeles del Club de Rol, los Estatutos y el Acta Fundacional, a las oficinas del Registro de Asociaciones y me pasó una cosa muy curiosa. Llego allí y bueno, una señora muy amable me atiende y tal y en cuanto saco los estatutos de la carpeta y ve que se trata de un Club de Rol puso una cara de pánico de tres pares de cojones. Yo ya me la esperaba pues una de las veces que había ido a pedir información me había dicho que indicara claramente cuales eran los fines de la asociación, postura por otro lado estúpida. ¿Os imagináis?

"
Los fines de la Asociación "Clube de Rol Los periquitos de Tenerife" son:

a) Realización de Rituales Satánicos
b) Rebanar cabezas con Katanas al menos una vez a la semana.
c) Crear un nuevo orden mundial basado en la violencia.
[...]

Los requisitos para ser socio de la asociación serán:

a) Superar un rito de iniciación consistente en un baño en la sangre de 1000 recién nacidos.
b) ..."

¿Me captáis no? Pero lo mejor de todo no fue eso si no que cuando fui a pagar las tasas a la oficina de Caixanova, la cual no dista ni 100 metros de la oficina del Registro, le digo a la señora: "Mira, no te importa si dejo esto aquí ¿verdad?" (Básicamente, la idea era no cargar con la mochila y la cazadora si no iba a tardar ni 3 minutos) Y la tía dijo que vale que lo dejara. Pero cual es mi sorpresa que cuando vuelvo, poco más y está la policía con los artificieros porque... ¡había dejado la mochila encima de la silla! Si es que hay gente para todo en esta sociedad. Lo mejor de todo es que la mochila estaba abierta porque había sacado la carpeta y tal y se veía claramente que eran libros pero bueno... la gente es así. Y lo que ya fue la guinda fue que mientras una me daba una charla sobre mochilas y tal la de atras apunta: "y además tiene así barba y tal..." ¿Qué pasa? ¿Si tienes barba eres automáticamente mulsulmán? Y lo que es peor, ¿si eres mulsulmán eres automáticamente un terrorista?

No quiero ni pensar la que se podría haber montado si llego a haber ido con una camiseta y un chandal. Ahora mismo estaría en A Lama.